26 enero, 2006

Comentarios al Libro “The World is flat”

Estoy leyendo este libro que ha resultado muy interesante y que abre una puerta para discutir sus contenidos. The World is flat, o su traducción "El mundo es plano" (o algo así), escrito por el periodista Thomas L. Friedman, aparece como uno de los libros más recomendados para quienes quieren entender cómo se perfila el mundo hoy y cómo será en el futuro cercano. Es un libro que basa todo su contenido en un concepto interesante y muy jugoso en cuanto a todo lo que implica que es el aplanamiento del mundo referente a la forma en como interactuamos, trabajamos, nos comunicamos, hacemos y construimos negocios, y de cómo las fronteras de países, las culturas, los idiomas ya no son más la barrera que impedía llegar a geografías y gentes. Y no nos puede extrañar que todo este cambio y aplanamiento tenga como responsable la acelerada revolución tecnológica que vivimos en este siglo. Es la tecnología y todo lo que posibilitan aplicaciones, banda ancha, Internet, los responsables de esto.

Con esto surge la tercerización como una de las formas de aplanamiento del mundo de las que más impacto tiene en nuestra forma de trabajar. La tecnología permite tercerizar una gran cantidad de tareas a países donde existe no sólo profesionales capacitados sino con sueldos varias veces menor que en USA o Europa. El libro cita ejemplos como doctores desde China dando segundas opiniones a diagnósticos de pacientes, o analistas financieros en Bangalore trabajando para bancos de inversión o consultoras e inclusos contadores llevando el día a día de una empresa desde allí. Y la clave está en que todo lo que se puede digitalizar se puede tercerizar.

Esto por supuesto lleva a la reflexión de qué cosas quedarán en un futuro haciéndose en aquellos países más adelantados donde los sueldos son mucho más altos y aunque existe gente muy capacitada y la productividad pueda ser mayor, nunca podrán ser más competitivos que países como China o la India en aquellas tareas repetitivas, más monótonas pero que se requiera personal capacitado para llevarlas a cabo. Y es que el tema de coste hace la gran diferencia

Qué les queda a aquellos países adelantados? No queda otra opción que defenderse haciendo aquellas tareas que realmente agregan valor y de las que podemos diferenciarnos. La Investigación y el Desarrollo son la clave para aquellos países más adelantados que marcan tendencias y que han sido los líderes en la innovación.

Yo tengo una opinión muy personal al respecto: Creo que este modelo donde países del tercer mundo o en desarrollo estarán haciendo tareas y trabajos con pagas de hasta 15 veces menos que a sus pares de países adelantados (y que además estén a gusto con ello) no es sostenible. Llegará un momento donde estas personas tendrán tantas necesidades de comprar y de acceder a todo aquello que su salario no les permite más que dentro de su país, que demandarán más. Demandarán tanto hasta estar satisfechos…como en un país adelantado… Será el momento donde se de vuelta la tortilla.

06 enero, 2006

Argentina desafiada

Hay muchos temas que me inquietan de la economía Argentina. La última frase que leí que provenía de empresarios exportadores me ha dejado pensando en el futuro del “granero del mundo”.Estos empresarios le dijeron al presidente del Banco Central: "Martín, así no podemos, si el dólar se cae de 2,90 dejamos de exportar".

Mi sensación al escuchar esta frase fue la de un país más vulnerable de lo que pensaba, de un país que depende del tipo de cambio para exportar y no de la diferenciación que crean las industrias para competir contra otros países (esto lo sabía pero escuchar esta frase de la forma que está dicha es muy fuerte).

Está claro que lo que exportamos tiene mucho de commodities donde lo que importa es el precio y no el valor agregado al producto. Hasta cuándo podrá el gobierno sostener el tipo de cambio para beneficiar a los productores? Está claro que no para siempre y si no se implementan medidas para fortalecer la industria Argentina y diferenciarla del resto, no habrá posibilidad de una economía fuerte y de un crecimiento sostenido. El momento de aprovechar la situación para salir del pozo, para mí, ha terminado, al menos debería ya terminar. La próxima etapa de nuestra economía debe focalizarse en establecer las políticas necesarias para posibilitar que la industria y los servicios en la Argentina tengan su diferenciación más allá del precio. Hay muchos cambios que se necesitan implementar, hay muchas inversiones que se deben realizar porque la capacidad productiva de Argentina está por tocar su límite.

Me queda la duda de si no hubiera sido mejor que Kirchner en vez de saldar la deuda con el fondo, utilizara ese dinero para dinamizar la inversión en Argentina y fortalecer nuestra industria para prepararla para competir en un mundo donde el tipo de cambio específicamente no es quien manda.